En la última jornada, el cuadro de la Ciudad Jardín sólo debe ganar en su visita al puntero Universidad Católica, esperar que el Decano no pierda ante Santiago Morning o bien, aguardar una derrota de Ñublense frente a Unión San Felipe.

El Clásico Porteño en la serie de Honor se vería interrumpido en caso del descenso de Everton / foto: Danilo Márquez

Complicado panorama tiene Everton de Viña del Mar para permanecer en Primera División tras perder el sábado por 1-2 ante Audax Italiano en Sausalito y el inesperado triunfo de Ñublense por el mismo resultado sobre Universidad de Chile en el Estadio Nacional.

Los dirigidos de Diego Osella quedaron en la penúltima posición con 34 puntos, uno abajo de Santiago Morning y a tres del conjunto chillanejo. Para salvarse, los oro y cielo primero deben derrotar imperiosamente al principal candidato al título 2010, Universidad Católica, nada menos que en San Carlos de Apoquindo y luego, esperar la ayuda de los equipos regionales Santiago Wanderers o Unión San Felipe.

A pesar del punto de distancia con los recoletanos, la menor cantidad de partidos ganados (ocho contra nueve) condenaría al descenso a Everton en caso de igualdad de puntaje. Así, sólo una victoria o empate caturro con Morning o bien, una derrota de Ñublense que recibe a San Felipe -sin nada que disputar- mantendría a los de la Ciudad Jardín en Primera División. En este último caso, igualarían con los rojos en 37 unidades, pero Everton los superaría en victorias (nueve contra ocho) y disputaría la Liguilla de Promoción.

Misión casi imposible para el representativo viñamarino, que en caso de igualar o perder con la UC volvería al Ascenso donde permaneció diez temporadas (1973-1974, 1982, 1995-1999 y 2001-2003), cinco menos que su archirrival, finalizando un exitoso ciclo que lo llevó a campeonar en el Torneo Apertura 2008 y una reciente gira por Inglaterra y España.