Equipo que gana repite fue la premisa utilizada por Emiliano Astorga, alineando a los mismos titulares que vencieron con tranquilidad a Barnechea hace una semana. Hoy se enfrentaba a un equipo que venía de ganar de visita y en una cancha históricamente complicada para el Decano, es decir la exigencia era mucho mayor y el partido se convertía en un buen indicador para conocer el real nivel del equipo en este torneo.

El partido lo podemos dividir en dos, Santiago Wanderers buscando el gol y Santiago Wanderers administrando la ventaja.

En la primera fase el Decano mostró lo mismo que frente a Barnechea, la búsqueda de una salida limpia con sus volantes centrales y el descuelgue de los laterales volantes. Naturalmente el juego se concentraba por la izquierda con Marco Medel cargándose hacia ese sector y buscando asociarse con Barriga, Luna y los delanteros. Por la derecha Abarca estaba más contenido, lo que no es de extrañar debido a que no es un jugador acostumbrado a proyectarse en ofensiva.

Pese al gol en contra el equipo no cambió, continuó haciendo su juego, confiando en sus armas y con la convicción de que esta era la única forma de obtener un resultado favorable. El equipo está consciente que lo colectivo está por sobre lo individual y en caso de que se cometan errores estos se subsanan con el trabajo del grupo. Situación digna de destacar y que hacía tiempo no veíamos en Santiago Wanderers.

El Decano dominó a Cobreloa, el gol fue solo un accidente, y el juego de los caturros terminó por darles la ventaja en el marcador.

Luego del 2-1 el equipo decidió retrasar sus líneas para defender la ventaja. Sin embargo esto no fue echarse atrás solo para repeler los ataques en razón de una mayor cantidad de jugadores en defensa, fue un retroceso estructurado, en el cual el equipo se compactó, leyendo la estrategia de Cobreloa.

Si el local buscaba llegar al gol mediando pelotazos cruzados, el Decano bajaba a sus laterales volantes y ponía 3 centrales a repeler los cabezazos. De esta forma, pese a apostar por el contragolpe casi todo el segundo tiempo, el equipo no pasó susto, aplicando a la perfección su estrategia defensiva.

El triunfo fue claro, indiscutible y obtenido desarrollando de buena forma el libreto de Astorga, los jugadores entienden lo que quiere el técnico y lo ejecutan bien en la cancha. Esta vez frente a un rival y una cancha mucho más exigente que en el debut lo que da más seguridad respecto a lo que puede hacer el equipo en esta temporada.

Ahora viene Universidad de Chile en condición de visitante, quizás el partido más complicado que jugará el Decano en este semestre. Así como el equipo puede adaptarse tácticamente a los distintos momentos que ofrece el partido, también es importante que exista una flexibilidad de acuerdo a lo que ofrezca el rival. Hoy los santiaguinos de azul poseen una gran dinámica en la mitad de la cancha y se ve necesario incorporar un jugador con mayor despliegue físico y capacidad de marca en ese sector de la cancha para no verse sobrepasado por el rival. Ante este escenario el hombre llamado a incorporarse al equipo es Sebastián Méndez, sin embargo se encuentra lesionado de cara a este partido.

Si se desea ganar a Universidad de Chile es importante que ellos no manejen el balón a placer, se debe incorporar marca en la mitad de la cancha y ante la ausencia de Méndez el hombre llamado a ocupar este puesto es Giakumis Kodogianis.

En la fecha 3 Santiago Wanderers tiene la oportunidad de demostrar que es un equipo que tiene previsto las distintas dificultades que presentan sus rivales y que no cuenta con solo once jugadores, sino con un plantel donde quienes están fuera pueden ingresar y hacer un buen trabajo.

Otro lindo desafío se viene este fin de semana.