El partido pasado frente a Cobreloa el equipo mostró un buen funcionamiento por largos pasajes del partido, hasta que Ivo Basay decide realizar cambios y regalarle los puntos al rival, pero obviando esta situación a nadie le parecía extraño que se repitiera la formación titular que empatara en la última fecha.

Viana; Parra, Luna, Prieto, Opazo; Mendez, Ormeño, Valencia, Sagredo, Mier y Canales como único punta, dibujando un 4-2-3-1 fue la formación que salió a la cancha para intentar derrotar a O’higgins.

Se podría hacer un análisis futbolístico, pero la verdad es que no vale la pena ¿Por qué? Porque el equipo no jugó a nada durante 90 minutos. Podemos contar apenas un remate al arco en el primer tiempo y pelotazos en el segundo.

Algunos podrían pensar que el bajo rendimiento de Santiago Wanderers tuvo relación con el rival, O’Higgins, campeón vigente de nuestro fútbol. La verdad es que no, los celestes solo se dedicaron a presionar, mantuvieron un orden en defensa y consiguieron un gol mediante pelota parada (problema insoluble para el Wanderers de Basay, seguramente no lo trabaja) y otro terminado el partido, dejando para el espectador neutral un partido para quedarse dormido.

El Decano perdió porque no mostró ninguna idea de juego, ningún jugador era capaz de jugar al espacio o encarar, los laterales nunca pasaron al ataque y los volantes rara vez le marcaban el pase a quien conducía por el centro, Canales huérfano en delantera e incapaz también de pivotear. Los caturros fueron un desastre, se mostraban como un equipo pasivo, con miedo, casi como si quisieran que el partido terminara rápido para poder irse a casa, pocos se salvan de esta crítica.

Cuando un equipo no funciona el técnico realiza cambios, si, pero en la banca de Santiago Wanderers está Ivo Basay, quien realiza cambios tarde y mal. Los ingresos de De La Fuente y Cellerino llevaron a los caturros a jugar aun peor, porque simplemente se apostó a un pelotazo frontal para los dos centrodelanteros. Es increíble que el DT cometa el mismo error que el partido pasado y fue evidente para todo aquel que vió el partido, no por nada lo hemos calificado como el rey del error obvio.

Pero el desastre no terminaría con el pitazo final, lo peor llegó cuando el técnico da declaraciones a la prensa, comenzó con sus clásicas evasivas y excusas para justificar su nulo trabajo que repercute en un mal juego, para terminar enunciando con un tono despectivo estas frases:

«»Este equipo tiene tres campeonatos en 125 años y en los últimos ha peleado descensos… Es algo que pasa con Wanderers y también parece que con Valparaíso«

«No podemos ilusionarnos con ser campeones. Son injustas las críticas»

«Cuando yo llegué el equipo llevaba 3 años peleando el descenso»

«Parece que Valparaíso es una provincia bastante especial»

«Es algo que pasa con Wanderers y también parece que con Valparaíso»

 

Para comenzar que alguien le diga a este sujeto que Santiago Wanderers tiene 121 años y no 125.

No se si en todos nuestros años de historia se habrá vivido una situación como esta (lo dudo), pero desde que tengo memoria, es primera vez que un técnico ningunea a la institución y a la ciudad en vivo para toda la región.

¿Quién te crees que eres Ivo Basay para venir a tratar de poca cosa a Santiago Wanderers? No solo es la institución que te está dando de comer mientras que tu solo le haces daño, sino que estás hablando como si tu fueras más que el Decano del fútbol chileno, siendo que como DT eres un perdedor y hablas como si fueras ganador. Desde enero del 2013 a la fecha solo has cosechado fracasos en la banca caturra y te has ganado el odio de todos los estamentos del club, no por tus malos resultados en la cancha, sino por tu forma de ser con quienes te rodean.

Hay técnicos, muchos técnicos que han fracasado, independiente de las condiciones futbolísticas y económicas, pero ninguno ha tenido la sinverguenzura de ningunear a Santiago Wanderers ni Valparaíso, porque pese a todo lo mal que pudo haber sido su desempeño, han sido conscientes de la institución en la cual trabajan, saben donde están, mientras que tu Ivo Basay vives en tu mundo de fantasía, en el cual eres el rey y todo lo que haces es correcto.

Ahora les toca a ustedes señores dirigentes, si son tan wanderinos como dicen ser no pueden pasar por alto estas ofensas, argumentos tienen de sobra para mandar a Ivo Basay a su casa y desearle que no vuelva nunca más a rondar estas tierras. La situación ya no da para más, no se quieren ni disculpas ni explicaciones, Ivo Basay y todo su cuerpo técnico deben irse de Santiago Wanderers para siempre.

En 125 años no habrá nadie tan odiable como tu, Ivo Basay.