Fuera de todo pronóstico, la semana recién pasada en que Wanderers volvió a la cancha, nos dejó varias noticias tanto dentro como fuera de ella. Una victoria, una derrota, los primeros refuerzos y una partida que nos pilló de sorpresa y que no deja de doler a los hinchas.

Juan Pablo Enríquez
http://twitter.com/JuanEnriquezSW

Dentro de la cancha.

Wanderers en los 2 partidos disputados ante Calera, con un plantel, diezmado, sin nuestro arquero titular, sin Agustín Parra afirmando la defensa, sin un 10 y sin nuestro goleador Carlos Muñoz, se las arregló para sacar el partido de local adelante y, según se comenta (no fui a Quillota), de haber tenido algo más de suerte también nos traíamos puntos del Lucio Fariña. Sin embargo el problema de Wanderers, más allá de sumar o no los puntos, es su juego. El equipo, al igual que en muchos pasajes del campeonato de apertura recién pasado, no tiene una línea de juego definida, en parte, por la falta de jugadores y en parte porque nuestro DT jamás dio con un 11 titular, jamás repitió un equipo 2 fechas seguidas.

Los partidos con Calera dejaron nuevamente esto en evidencia. Durante toda la pretemporada se trabajó con un 3-5-2 que duró apenas 45 minutos, para luego pasar a un 4-4-2, situación interesante. ya que con el 3-5-2 se busca tener variantes en ataque con el apoyo de los volantes externos pero estos no participaron nunca, mientras que jugando luego con un 4-4-2 sí llegaban al área contraria porque no tenían la doble responsabilidad de defender y atacar, ya que ahora tenían a un compañero cuidándole la espalda. Si vamos a jugar con un 3-5-2 la defensa debe contar con un tipo de experiencia que ordene todo en la posición de líbero y luego que esta formación se repita todos los partidos. Deben conocerse de memoria para tener éxito, tal vez en un futuro se pueda conseguir con la llegada de Vergara y la recuperación de Parra, pero Llop se equivocó al improvisar una defensa que nunca había jugado junta y poniendo al más inexperto de líbero. Un desastre que no le daba seguridad a nadie. Por otra parte, ante la ausencia de un 10 se improvisó a Quiroga en esa posición, quien si bien le pone todas las ganas y la garra que lo caracteriza, no es apto para la posición de conductor, no tiene la fineza y precisión para dar ese último pase que deja al delantero sólo frente al arco. Nuevamente Barrales queda huérfano y debe salir del área a buscar pelotas, se pierde peso ofensivo y todo se vuelve difuso y desordenado. Somos un equipo que está absolutamente quebrado en la mitad de la cancha y el único puente que se construye es a través de pelotazos.

Frente a este panorama, tanto en la victoria como en la derrota, nuestro DT se limita a decir que jugamos bien, que fuimos superiores, que es lo que estábamos buscando, que Quiroga rinde de 10, que los jugadores hacen lo que él quiere y bla bla bla. Con su permiso señor Juan Manuel Llop le digo que sus declaraciones no tienen nada que ver con la realidad, todos nos damos cuenta que este equipo no juega a nada, que cuando se gana es porque nuestro jugadores corren más que el resto, porque sienten esta camiseta y logran sacar los partidos adelante a pura garra, pero de fútbol nada. Por favor, sáquese los lentes de cuero, Quiroga no es 10 y no rinde de 10, deje de quemar a Robles dándole responsabilidades que no le corresponden, con un plantel tan corto el equipo sale fácil, tenemos un jugador por posición pero usted nos complica todo, córtela con el conformismo y la nula autocrítica, reconocer los errores es el primer paso para mejorar. Los jugadores saben que la cosa no funciona, sólo falta que usted se dé cuenta de ello, y hágalo luego porque se vienen 2 clásicos contra el equipo de la ciudad de al lado, el partido más importante del año para todo wanderino, a menos que se juegue una final, ahí no valen los experimentos, porque hay que entrar a ganar o ganar.

Llegan 2 refuerzos y en algo hacen ilusionarnos, ambos con trayectoria y que en el papel serían aporte. Adán Vergara tiene la misión de afirmar la defensa y Santiago Biglieri de darle fútbol al medio campo, 2 de las 3 grandes falencias de Wanderers este año, la tercera son los goles, consecuencia en parte del nulo funcionamiento del medio campo. Veamos si con un jugador que le meta pelotas a Barrales este se convierte en el goleador que nos prometieron.

Fuera de la cancha.

Lunes 27 de junio y nos desayunamos con la noticia de que Llop había cortado a Pablo López de Wanderers, el volante alegaba por la prensa que la decisión ni siquiera se la comunicó el DT, sino que se enteró por los dirigentes que ya no lo querían en el club.

Si bien Llop tiene razón de que López no ha rendido, no ha sido el conductor que él y Wanderers necesitaban este año y también el año pasado, esto no es justificación para darle un trato así al jugador, por respeto, la decisión se le debe comunicar a él de forma personal, no por la prensa ni por terceros.

Si Llop estaba tan disconforme con el rendimiento de López ¿por qué no se lo dijo antes?, ¿por qué no lo mandó a la banca? ¿Acaso el no tener un rendimiento óptimo es motivo para ser expulsado del club con todo este escándalo? por lo menos a mí no me parece, ni la forma ni los motivos esgrimidos por las partes. Esto da para pensar que hay algo más aquí, una pelea personal, algún enfrentamiento en el camarín o en la pretemporada, pero en estos momentos es sólo especulación, tal vez en un tiempo se aclare la situación.

Ahora vamos a lo subjetivo, acá no están echando del club a cualquier jugador, nos están quitando a Pablo López, están tratando como un desconocido a nuestro «Crá», al que nos salvó de caer a tercera y nos dio el ascenso el 2009, el que se mandaba partidazos contra ese equipito de guata amarilla, el que daba felicidad con sus goles y siempre retribuyó todo el cariño que le entregó el hincha. Qué se creen estos tipos de venir a tratar así al Rumpy López. Está bien, no rindió, pero si quieren traer a alguien mejor se le manda a la banca, no se le trata como uno de los tantos refuerzos que han venido a pasear al puerto, porque Pablito no se merece un trato así. Además del quiebre que seguramente producirá en el camarín, ya que además de ser querido por los hinchas Pablo López es líder dentro del plantel, se manejó muy mal este tema y tengo la impresión que aún no se sabe toda la verdad del asunto.

Se la hicieron al «Bibi» González y al «Panzer» Alfaro, nos dijeron que no estaban para primera, pero quienes trajeron para reemplazarlos no estaban ni para tercera. El hincha tiene memoria señores y no perdona los malos tratos a jugadores que no lo merecen.

No es la forma señor Llop, no es la forma de jugar, no es la forma de dar declaraciones y no es la forma de tratar a los jugadores, perdió el rumbo y espero que lo enmiende ahora porque se nos vienen 2 clásicos y un campeonato difícil donde vamos a partir mirando la parte baja de tabla, o cumple o mejor tome el avión a Rosario, por el bien de Wanderers espero que cumpla.

ADELANTE WANDERERS