La molestia del hincha caturro reflejada en una carta abierta a sus dirigentes frente a su nefasta gestión al mando del club que tiene al Decano sumido en la mediocridad futbolística y sin indicio alguno que permita ilusionarse con cambiar esta realidad.

Juan Pablo Enríquez
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Dirigentes de Santiago Wanderers de Valparaíso:

Este lunes como todos los días luego de levantarme me dispongo a leer la prensa regional con tal de informarme sobre el pasar de Santiago Wanderers, más aún en período de contrataciones donde cada día los hinchas esperamos encontrarnos con algún indicio de refuerzo para el Decano, un rumor, un acercamiento, pero como ha sido la tónica de los últimos años la prensa regional no dice nada sobre el tema.

Por el contrario hoy los hinchas nos encontramos con una entrevista a la mejor figura que tuvo Wanderers este mediocre 2011, Sebastián Ubilla, quien manifiesta sus ganas de emigrar del club con apenas 21 años. Luego de leer la entrevista completa puedo decir que ese fue un ejercicio inútil ya que la idea principal está reflejada en el encabezado de esta.

Ubilla y sus ganas de partir: «Estoy harto de pelear descensos con Wanderers»

Creo que no hay frase más precisa para reflejar lo que ustedes señores dirigentes han hecho con un club que solía pertenecerle a todos los porteños, con su gestión enfocada exclusivamente a la venta de jugadores con tal de recuperar la inversión que realizaron cuando tomaron el club dejando completamente botado el primer equipo, el cual comienza todos los años sin otra misión que sea la de mantener la categoría.

Negarse a esta realidad con sus palabras de buena crianza ya es imposible, con cuatro años al mando del club ya demostraron que el conseguir logros con Santiago Wanderers para ustedes no es un objetivo y esto lo planteo alejado de subjetividades. Dejemos de lado los fracasos con refuerzos que no rindieron, los seis técnicos que han pasado por Santiago Wanderers desde que ustedes asumieron quienes no tienen ninguna similitud entre ellos dejando en claro que no existe proyecto futbolístico alguno. Olvidemos todo lo que ha pasado en el club, porque solo basta hacer un ejercicio para desenmascararlos y dejar en claro su real intención en el Decano, no nos hagamos problemas sacando conclusiones de sus actos y vamos a sus palabras.

Si uno revisa las entrevistas que ustedes señores dirigentes han realizado en diarios, radio y televisión en los años que llevan al mando del club nos encontramos con que todo lo que ustedes hacen, toda su inversión va enfocada «a la venta de jugadores que es lo que permite recuperar la inversión que se realiza en el club», esta frase (obviamente con matices) debe ser la más repetida por ustedes desde que asumieron el club.

«Queremos salir campeones», «queremos tener participación internacional», «queremos ser animadores del campeonato» nada de esto se escucha en la sede de calle Independencia, quizás algo por cumplir cada vez que empieza un nuevo torneo para calmar a la gente, asegurándonos que el equipo que tenemos puede lograr algo, mentiras y nada más, tenemos la historia de nuestro lado.

Hoy es Ubilla, ayer fueron Parra, Godoy, Muñoz y Mena, jugadores que conscientes de sus capacidades declaran que quieren partir del puerto porque ven que en este club están condenados a la mediocridad, realidad en la que estamos sumidos por su gestión, realidad que parece este año tampoco va a cambiar.

Los felicito dirigentes, en cuatro años lograron lo imposible, que a nuestros canteranos les importe un huevo defender la camiseta de Santiago Wanderers de Valparaíso porque por desgracia acá no pueden lograr un desarrollo pleno como futbolistas. Pero aun hay más, fueron capaces de conseguir que la gente se alejara del estadio, y ese si que es logro, cada día su gestión, sus decisiones y su nulo interés por construir un Wanderers grande matan poco a poco la pasión del hincha wanderino, quien ve que su club no le pertenece y que este no tiene nada que ver con aquel equipo del cual ellos se hicieron hinchas, a pesar de que los fieles siempre vamos a estar alentando en Playa Ancha.

Me despido molesto y decepcionado porque veo con tristeza como mi club se hunde en la mediocridad y no hay ningún esfuerzo para sacarlo de ahí, lo que tenemos ahora no se si pueda llamarse Santiago Wanderers de Valparaíso.

Juan Pablo Enríquez González.
Hincha.