Era el momento indicado, estaban todas las armas para lograr ese ansiado objetivo, los caturros comenzaban a sentir nuevamente esa sensación de esperanza, pero sucedió lo que nos ha ocurrido en estos últimos 8 años.

El camino estaba pavimentado para que este campeonato se pudiese lograr un objetivo concreto, quedaban las últimas fechas por jugar, con un sistema de juego que se iba consolidando fecha tras fecha y con unos jugadores, como nunca, compenetrados y talentosos. Este torneo sin lugar a duda se podría aspirar algo, y solamente había que mantener lo que estaba mostrando el plantel en las fechas anteriores.

LA DEBACLE 1.1

Si bien muchos Wanderinos todavía mantenían cierta desconfianza en el planteamiento de Basay, poco a poco esas críticas habían desaparecido y la desconfianza parecía transformarse en sueños. La ilusión estaba al tope, y eso se demostró en la cantidad de hinchas que llegaron a Santa Laura, siendo locales ante el último campeón.

Era la ocasión idónea para ratificar el buen momento, un plantel titular casi completo (Menos Ormeño, nuestro capitán), y bastaba realizar el fútbol exhibido anteriormente para luchar por traerse los 3 puntos.

02112013-IMG_4823Pero no contábamos con que teníamos un genio en el banco, alguien que supuestamente había encontrado el esquema y los jugadores para lo oncena titular. Sin embargo, nos sorprendió a todos con ese rombo al medio, dejando el medio campo al descubierto. Y así en un abrir y cerrar los ojos, el equipo de rojo pareciera que tenía 27 jugadores más que el nuestro. Un esquema errado, jugadores confundidos y mirando siempre el número de camiseta del contrario. La pelota no circulaba, y en un momento parecía que los jugadores caturros estuvieran jugando al famoso juego “El tontito”.

Cada ataque de ellos era ½ gol, los laterales sobre pasados, el medio campo que no era capaz de quitar ninguna pelota, y con delanteros aislados. El equipo estaba perdido, mientras el millar de hinchas que llegó alentar al equipo veía como se escapaba la posibilidad de luchar por algo importante, pero el aliento no dejó de existir.

El gol de Pol que nos daba la ventaja, era el momento para reordenarnos en defensa. Pero 60 segundo después venía el empate, que era justo, ya que el único equipo que proponía era el  de los hispanos.

Ni hablar de lo que pasó después, todos sabemos el resultado. Veíamos como la ilusión se apagaba, y la calculadora comenzaba a transformarse en nuestra compañera amarga.

Las declaraciones de Basay -Que para variar no habla nunca de fútbol, solo habla frases de características amateur- fueron duras, poca autocritica hacia su planteamiento, pero peor aún, les endosaba la responsabilidad a los jugadores. Siendo que él es el encargado de darle el apoyo necesario para superar esta dolorosa derrota.

Quedando 4 fechas por jugar -3 de local y 1 de visita-, creíamos que se podía pelear, y que esos puntos eran importantísimos. Los jugadores en la semana todavía mantenían la ilusión. Y nosotros como hinchas pensamos que Basay cometió un error, y que el siguiente partido con Rangers había que remediarlo.

LA DEBACLE 1.2

Y nuevamente el ingenio de nuestro DT nos permite pensar en la medianía de la tabla, no bastaron los errores anteriores frente a Unión Española, sino que ahora se repiten frente a un rival que en la tabla se encontraba bastante más abajo que nosotros.

1393067_10151701238770544_386277163_nMás allá de los problemas con el estadio, el DT nunca le dio la vuelta al partido. Cambió a 3 jugadores que supuestamente habían entrado para arreglarle los errores anteriores. Pero no, el problema no son los jugadores, es el esquema que cambiaste, que modificaste provocando una confusión tremenda en los jugadores. Y lo peor de todo, es que los hinchas,  que muchas veces se nos critica porque nos creemos DTs lo advertíamos en las redes sociales. Ese rombo en el medio campo no sirvió y nos trajimos una boleta por 3 goles a 0, lo que sepulta definitivamente nuestras opciones de alcanzar la liguilla, aun que la calculadora diga que todavía es alcanzable.

Pero siendo realista, con el DT que tenemos, que no es capaz de tomar decisiones determinantes en los momentos determinantes es imposible ilusionarse. Los cimientos no son sólidos, y quedó demostrado en esta ocasión, al primer tropezón el equipo se destruyó, y el DT es el culpable. Expuso a los jugadores públicamente y en muchas ocasiones, los canteranos del club se sintieron humillados.

Les dejo una frase muy cierta:

“El fútbol es simple, los entrenadores lo hacen complicado”

 

José Tomás Gubler Cruz
@josetogubler